[Actualidad] Xoel López – «Paramales» (2015)


Últimamente enfrentarse a un disco de Xoel López viene siendo algo así como volver a compartir cosas con una ex. Suele ser una experiencia a la que al principio uno se resiste pero que al final te acaba calando hondo.
Si algo le sobra a el coruñés es una pasión en su música y un encanto irresistible, pero bien es verdad que «Atlántico», su primera referencia bajo su nombre después del exilio voluntario a Baires, fue un paso tremendamente rupturista y en el que a más de uno nos costó entrar. A mí, particularmente, me ha llevado un par de años rendirme a la magia de su nuevo repertorio, pero una vez que entras todo lo que te da a cambio es enorme y de un romanticismo que poco o nada se estila a día de hoy.
Descubrí este “Paramales” en directo (al corazón) tras una irrepetible actuación en el inmejorable enclave del Vida Festival, con el músico lanzando en solitario todos sus remedios al viento, para que cada cual los recogiera al vuelo.
Después de quemar varias etapas y superar el rollo mod, el indie o el éxito masivo, Xoel hace varios años que se quitó todos los envoltorios de encima para situarse al frente con su propio nombre. Tras un «Atlántico» que al final se convirtió en uno de esos discos de larga duración y posterior redescubrimiento, ha acabado por clavarla con su segundo álbum y entregar una de las referencias más emocionantes de lo que va de año.
El primer corte, ‘Patagonia’, es una de las historias de amor más hermosas que he escuchado en mucho tiempo. Al galope de un arpegio cabalgante se va abriendo camino mientras encaja con su agradable timbre una fantástica melodía que envuelve un texto brillante y valiente: «Perderse no sería tan malo pensamos, pero volver, volver y contarlo será maravilloso«. También esa otra parte que te agarra el estómago y te humedece el ojo izquierdo: «Te dije por siempre me quedo a tu lado, venga lo que venga, pase lo que pase«.
Continúa el remedio sonoro con la optimista ‘Yo Solo Quería Que Me Llevaras a Bailar’, todo un hit y digno single que va creciendo a cada escucha. Tras el carnaval llega la calidez de ‘Antídoto’, en contraposición a su primera referencia en gallego, ‘A Serea o Mariñeiro’, con unos arreglos electrónicos que le acaban dando un aire psicodélico latino. Tras la tormenta, la calma más total en la belleza erótica de ‘Caracoles’ y hacia el ecuador del álbum otro de los picos altos del disco con ‘Todo Lo Que Merezcas’. Unos arreglos enormes la convierten en una ranchera o canción latina de despecho, con una letra durísima en contrapunto a una amable y serena interpretación («Que la vida te de lo que puedas aguantar, y que comprendas ahora que siempre devuelve el golpe el mar, y sientas que te han usado y sufras sin remedio, y si es perra la vida, se ensañe contigo un poco más«). Todo un canto a la esperanza desde la paz del que lo ha apostado todo y marcha en calma.
De la recta final cabe destacar musicalmente ‘Sol De Agua’, con un texto sociopolítico que refleja la situación en los últimos años del país vista con la distancia del que va y viene. ‘Almas Del Norte’, por su parte, nos devuelve a las estructuras de Deluxe y ya para el cierre se reserva, con ‘La Casa Hace Ruido Cuando No Estas’, el más bello final. Un tema compartido y compuesto por su mujer, Lola García Garrido, en el que se marcan un precioso dueto a flor de piel. Puro amor a todo gas.
Con esta colección de remedios y antídotos «paramales» Xoel se desmarca con uno de los discos del año en una historia que funciona y profundiza como pocas. Gracias por el poder de tu música, definitivamente escucharte nos hace mejores personas.