Entrevista con Encono


«Creo que realmente hacemos lo que nos nace sin preocuparnos por nada y, personalmente, me gustan mucho las bandas que tensan sus extremos» (David Acevedo, Encono)
Hace unas semanas os hablábamos en estas páginas de «Centraal», nuevo disco de los alicantinos Encono, que volvían a la palestra cuatro años después de publicar su potente debut discográfico. Para saber los porqués de esta larga espera y el estado actual del grupo contactamos con David Acevedo, voz y guitarra de la formación, que contestó de la siguiente manera a nuestro cuestionario:
Han pasado cuatro años desde vuestro debut. ¿Qué ha pasado en el seno del grupo durante este tiempo?
La banda tuvo un parón, inicialmente porque me fui a vivir fuera de España y cuando volví por el tiempo necesario para hacer las nuevas canciones.
¿Habéis sentido en algún momento desde dentro que el grupo había llegado a su fin o siempre habéis mantenido una actividad interna?
Nunca, pero sí que siempre hemos tenido claro tomarlo con calma y hacer las cosas cuando sea, sin preocuparnos mucho por tiempos y demás.
Publicáis el disco con Bcore pero en la edición en vinilo colaboran varios sellos más, algo bastante habitual en los tiempos que corren. ¿Cómo se gestiona una edición entre tantas partes?
Tanto esta vez como con el disco anterior lo hicimos igual, con la única diferencia que en la anterior participaron dos sellos y en esta cinco. Bcore se encarga de la fabricación, la editorial y los derechos digitales y con ellos firmamos un pequeño contrato. Los demás sellos colaboran con copias del vinilo, para después promocionarlas y venderlas cada uno por sus respectivos canales.
¿Son imprescindibles este tipo de asociaciones para sacar proyectos adelante en los tiempos que corremos?
Imprescindibles no son, depende de tu presupuesto, pero pienso que es la mejor forma de editar un disco para una banda como la nuestra, tanto por la cuestión económica como para la promoción. Al final somos un grupo de colegas sacando discos y montando conciertos.
En líneas generales me parece un disco algo más oscuro y “encabronado” que el primero. ¿Lo veis así desde dentro? ¿Ha sido muy diferente la situación del grupo en la creación de los dos discos?
La mayor diferencia ha sido el cambio de batería, y que ya habíamos hecho un disco anterior. Esto último hace que se vaya puliendo lo que buscas. Creo que este disco es un poco más melódico, manteniendo la oscuridad y la mala hostia que nos caracteriza.
En contraposición a ello creo que tiene vuestra canción más pop, una “Sin Control” que le sienta realmente bien a mitad del álbum. Habladnos de cómo surgió este tema ¿Sentís que habéis tensado al máximo los extremos de vuestro sonido con este disco?
Para nosotros esta canción es “La Popera” (risas). Al principio nos chocaba porque es la más diferente a lo que hemos hecho hasta ahora. Es una canción que salió prácticamente sola a partir de una línea de bajo y una de guitarra. Es la típica que te pones con ella en el local y a los diez minutos ya está funcionando. Creo que realmente hacemos lo que nos nace sin preocuparnos por nada y, personalmente, me gustan mucho las bandas que tensan sus extremos.
¿De dónde viene el título del disco, ese “Centraal” con doble a?
Viene de la estación central de tren de Amsterdam. Es el punto de encuentro y de paso más importante de la ciudad. Allí había un piano de cola negro que se usaba para practicar, pasar el rato, o incluso a veces para tocar un concierto improvisado. Era un sitio en el que, cuando esperaba a alguien escuchando pianistas espontáneos y viendo a gente pasar, me recreaba imaginando como serían sus vida, de donde vendrían o a dónde irían todas esas personas.
El primer disco lo grabasteis vosotros mismos y por lo que me comentasteis en una entrevista anterior teníais muy claro que era la mejor opción. En este caso habéis ido a grabar a El Miradoor con Marcos Velasco. ¿Qué os hizo cambiar de opinión para este segundo paso discográfico? Personalmente creo que habéis logrado un sonido más aplastante pero sin perder esa crudeza que caracterizaba al primer disco.
Sí. En el primer disco tuvimos la idea de hacerlo todo por nosotros mismos. Fue algo que, personalmente, tenía que hacer. Y a pesar del esfuerzo y el trabajo que costó, la satisfacción alcanzada vale más que todo. En el segundo nos dejamos de tonterías y nos pusimos en manos de profesionales (risas).
¿Cómo fue la grabación? ¿Llegasteis con las canciones muy definidas al estudio?
Muy directa y al centro. Llegamos al estudio con las canciones muy bien preparadas, para grabar en directo toda la base instrumental. La idea era hacer no más de tres tomas por canción e intentar escoger la más fresca y directa para después grabar las voces y algún pequeño arreglo. Nos sonó todo muy natural desde el principio y estuvimos muy cómodos.
Habéis comenzado ya a presentar las nuevas canciones en directo y tenéis bastantes fechas confirmadas de aquí a final de año. ¿Qué tal están funcionando esos primeros conciertos?
Pues nunca antes habíamos hecho un disco sin haber tocado antes las canciones en directo. Nos centramos en preparar las canciones para el estudio y después de grabar tuvimos que cambiar un poco la forma de tocar, el orden y demás, de cara al directo, de manera que los dos o tres primeros conciertos fueron un poco extraño para nosotros. Ahora mismo ya disfrutamos a tope de los temas y pienso que sonamos bastante contundentes.
Recientemente ha causado bastante revuelo la noticia de que Berri Txarrak tocaron en Nantes para una sola persona. Me sorprende que se viralice tanto algo que realmente creo que ocurre más a menudo de lo que muchos piensan.
La verdad es que a mí también me sorprende pero bueno, hoy en día lo de que se haga algo viral es un poco locura. Ocurre muy a menudo, pero esto la gente que no va asiduamente a pequeños conciertos no lo sabe, ni que muchas bandas cuando van de gira tienen que tocar un lunes o un martes, o en un sitio que no les conoce nadie, o que la gente que puede ir a su concierto es la que va asiduamente a conciertos sin importar quién va a tocar y el tipo de música que hacen. Acuden simplemente porque ver un concierto ya en sí es un planazo. Desgraciadamente, es el menor de los casos. Lo normal es que la gente vaya a conciertos de bandas que ya conoce y se sabe las canciones, que está muy bien, pero que si es tu única forma de ver conciertos es un poco limitada.
¿Os habéis visto en alguna situación parecida?
Sí, claro que sí, y pienso que es una experiencia de la que se aprende mucho, a valorar que tu música y el placer de tocarla es lo primero de todo. Te pone los pies en la tierra, que a más de uno le vendría muy bien (risas).
Por último, ¿creéis que pasarán otros cuatro años hasta que publiquéis nuevas canciones o la situación actual del grupo os hace pensar que no será así?
Pues eso no lo sé. La verdad es que desde el principio nos ha dado un poco igual los tiempos para hacer canciones y editarlas. Nos sentimos cómodos con eso y creo que va a seguir igual.
Fotografía: Paula Schmerz