Drive Like Jehu + Nueva Vulcano @ Sala Caracol (Madrid) 10-06-2016


Mi primer acercamiento a Drive Like Jehu fue a través de Hot Snakes. A finales de 2011 la banda que formaron Rick Froberg y John Reis tras la separación de los primeros llegaba a Madrid y lo hacía con No More Lies de teloneros. A ellos fue a quienes iba a ver y fue tan salvaje el impacto que me causaron unos para mí desconocidos cabezas de cartel que desde entonces me convertí a la causa e indagué en el resto de proyectos de estos dos animales de escenario. Así llegue hasta Rocket From the Crypt pero también a Drive Like Jehu, y fueron los segundos los que coparon definitivamente toda mi atención. Por eso, una cita como la de anoche se nos antojaba imprescindible, más aún tras ver desde la lejanía su paso por el Primavera Sound una semana antes.
Los de San Diego llegaban a Madrid tras recorrerse europa en la última semana, y lo hacían de la mano de La Castanya, promotora empeñada en acercarnos una y otra vez propuestas tan interesantes como imprescindibles para mantener vivo el underground en un país, cada vez más, de grandes festivales. Y la jugada maestra de Drive Like Jehu la remataban con Nueva Vulcano como teloneros. Nueva fecha de los de Barcelona en la capital y regreso a la sala Caracol tras haberla conquistado en su día con un sold out de manual. En esta ocasión no fuimos tantos los que disfrutamos del siempre efectivo directo de la banda pero la militancia sigue presente y una vez más coreamos temas como ‘El Mirlo’, ‘80% Agua’ o esa infalible dupla habitual que son ‘Dulce y Ácida’ y ‘Te Debo Un Baile’. También pudimos escuchar por primera vez los temas de su más reciente single, “Nombres y Apellidos”, encajados a la perfección en un set list al que ponían fin con ‘Reversible’. Siempre es un placer disfrutar de su directo y esta ocasión no fue una excepción.
Tras ellos se abría el telón y la maquinaria de destrucción sonora de Drive Like Jehu comenzaba a funcionar echándolo todo abajo. El acople de la guitarra de Reis nos daba la bienvenida a ‘Super Unison’ y con el primer golpe de batería empezamos a sentir los graves en el pecho. La banda que completan Mark Trombino y Mike Kennedy es la definición perfecta del post hardcore, es llevar más allá el sonido de bandas como Black Flag o Minor Threat, de coger los enrevesados e hipnóticos desarrollos instrumentales de Fugazi y convertirlos en un bofetón a mano abierta repleto de testosterona. Como un vendaval, ‘Speedo’ Reis no dejó de moverse espasmódico haciendo suya toda la parte derecha del escenario y Froberg se desgañitaba como si fuera su última noche en la tierra mientras bromeaba diciendo que no le quedaba ya voz en esta parte final de la gira. Por su parte, y en un segundo plano, el bajo de Kennedy marcaba junto a la efectista manera de aporrear los parches de Trombino un muro de sonido infranqueable.
Y mientras en temas como ‘Here Come the Rome Plows’ o ‘New Math’ el pogo en la parte delantera de la sala era de vértigo, en canciones como ‘Sinews’ o la brutal ‘Do You Compute’ nos mecían a su antojo subiendo y bajando intensidad y controlando el ritmo del concierto a la perfección de manera casi inconsciente. Con el público en el bolsillo se despidieron con la frenética ‘Bullet Train to Vegas’ para regresar al escenario poco después y rematar la noche definitivamente con ‘Luau’. Casi diez minutos en los que terminaron de vomitar todo lo que llevaban dentro, con Reis golpeando las cuerdas de la guitarra con su propio cinturón y dejándonos finalmente respirar aliviados tras una hora de auténtica violencia musical que nos golpeó desde el pecho hasta los pies. De esas cosas que solo se experimentan una vez en la vida.