Mourn + Hinds @ Sala Berlanga (Madrid) 10-09-2015


Un nuevo ciclo de conciertos ha nacido este año en Madrid. Respaldado por la Fundación SGAE y con “De Par en Par” como slogan se celebraban esta semana en la capital cuatro noches de conciertos a pares programados en la Sala Berlanga, un acogedor y cómodo teatro con un sonido a la altura y una visibilidad perfecta. A la primera de estas fechas nos acercamos para ver a dos de las formaciones más internacionales que tenemos ahora mismo dentro del nuevo panorama rockero de nuestro país. Tanto Mourn como Hinds son habituales de medios internacionales como Pitchfork y de los escenarios norteamericanos y británicos, y ambos grupos lo han conseguido con una trayectoria, hasta ahora, fugaz. Las primeras tan solo con un disco y un posterior single editados y las segundas con poco más de unas demos y un debut en largo que publicarán dentro de unos meses.
Se encargaron de abrir la noche Mourn y tal vez debería haber sido al revés. Esta vez no nos pillaron por sorpresa, y tras dejarnos con la boca abierta en su concierto como teloneros de Madee en enero de este mismo año, volvían desde Barcelona para refrendar que les sobra energía, desparpajo, garra y actitud. Todo ello a un nivel casi insultante dada su juventud (y prometo que está será la última vez que utilice lo de juventud para referirme al grupo). Arrancaron con una introducción instrumental y tras ésta una ‘Your Brain is Made of Candy’ en la que Jazz acabó desgarrando su voz como no habíamos visto antes, proclamando que se “comerá nuestros cerebros” y que “empezará por el corazón”, demostrando que sus interminables giras les están convirtiendo en perfectos animales de escenario, si es que no lo eran ya. Además de repasar su debut homónimo y su más reciente single, “Gertrudis”, aprovecharon para presentar algún tema nuevo que nos lleva a intuir por donde irán los tiros en el futuro. Un sonido oscuro, con composiciones más elaboradas en lo instrumental y algo menos directas pero con el mismo gancho. Un poco en la línea de ‘Silver Gold’, tema que cierra su primer disco y que interpretaron a un nivel de intensidad doloroso. Con las voces y guitarras de Carla y Jazz siempre compenetradas, no hay que restar importancia a una base rítmica que sostiene el tinglado con cimientos de acero desde la parte trasera del escenario. Antonio tiene la pegada de los grandes tras la batería y Leia lanza unas líneas de bajo tan precisas como brillantes y que consiguen elevar los temas a otro nivel. Se despidieron tímidamente, como si una vez que se acabara la música no les interesara estar bajo los focos a pesar de que lo hicieron con el público literalmente en pie y bajo una sonora ovación.
Tras ellas y el desfile de familiares y amigos que ocuparon sus butacas para ver a las Hinds (el concierto colgó el cartel de sold out aunque desgraciadamente no lo parecía en el concierto de Mourn) les tocaba a las madrileñas la dificil tarea de poner fin a la noche. Lo hicieron a su manera, con unas canciones que se sitúan entre el rock garajero (o lo que ahora se entiende por esto) y aquel denominado “tontipop” (tal vez más por actitud que por sonido) y con las que pusieron a bailar a sus fans entre bromas y agradecimientos. No consiguieron conquistarnos a todos pero no fue porque no lo intentaron.
Texto: Iván Díaz
Fotografías: Luis Arteaga