Everlong Live Sessions – Estrella Fugaz


Tras Estrella Fugaz se encuentra el músico Lucas Bolaño, que ya se asomaba entre los barrotes de Experimental Little Monkey y que sigue empeñado, con este nuevo proyecto, en atraparnos a base de unas canciones de arquitectura pop y recovecos eclécticos. “Lo de llevar una guitarra española siempre te acerca a la etiqueta de folk o a algo así como el post folk, pero yo diría que lo que hago es básicamente pop. Me gustan otros estilos, como el reggae o la cumbia, que en este disco igual aparecen de manera más descarada, pero es pop al fin y al cabo”. Así es y así nos lo cuenta el propio Lucas, con quien pasamos una mañana charlando después de sentarle frente a nuestra cámara para interpretar un par de canciones en formato acústico. Pero de eso os hablamos luego.
Antes, centrémonos en “Luminosa”, segundo disco que publica como Estrella Fugaz y que llegaba a nuestros oídos hace una semana. Lo hacía bajo el amparo de Sonido Muchacho, sello con el que firmaba tras su debut y que ha contribuido a generar cierto runrún en redes sociales de cara al lanzamiento. “El otro día miraba las reproducciones y ya hay adelantos de éste que han superado las del disco anterior. La gente muchas veces creo que idealiza lo de la independencia pero lo que está guay es poder hacer lo que tú quieras”, afirma Lucas no sin antes recordar con cariño su paso por Caballito Records. “Santi, de Caballito, lo hace por amor al arte y te trata con mucho cariño pero tampoco tiene tiempo para llegar a todo lo que quiere. Con un sello como Sonido Muchacho pues ya es otra historia: hay presupuesto para hacer vídeos y demás”.
Precisamente fue a través de un videoclip, el correspondiente a ‘Una DDH y el Electr-o-pura’, como pusimos el radar alerta ante lo nuevo de Estrella Fugaz. Esas imágenes en 4:3 y esa especie de ceremonia de secta marciana no podían acompañar mejor a una canción de riff limpio y machacón, línea de bajo estructural y melodía vocal hipnótica. “El videoclip es de de Sergio Soso. Él graba en analógico y me molaba el rollo ese de personajes extraños, el color… Un rollo entre cotidiano y extraño. Le pasé referencias de cosas que me gustaban e hicimos esa locura”, nos cuenta al respecto. También destaca en ella la colaboración vocal de Valdivia, que aunque intercala castellano con italiano en el estribillo le aporta un sonido afrancesado que invita a la abstracción. “Coincidimos en Murcia, en el Microsonidos, y allí nos hicimos colegas. He producido cuatro temas suyos en casa. Ella canta super guay, hace unas armonías muy creativas, y fue algo natural la colaboración. Estoy muy contento con el resultado”.
Cuando Lucas habla de su casa no solo se refiere al lugar donde habita, sino también al bautizado como Casita Fugaz Estudio, dónde ha dado forma a “Luminosa” casi al completo: “Lo grabo todo y lo mezclo en casa, salvo alguna batería y el master, que es externo”. Siendo así, ¿ha logrado esquivar esa etiqueta tan de moda que es la de bedroom pop? “Bueno, al final esto es lo que hago desde los 17 años, y seguiré haciéndolo hasta la muerte. A no ser que me toque la lotería y me pueda montar un pedazo de estudio, claro ”, afirma con humor. Su única aventura fuera fue “Un Sendero Fluorescente”, debut como Estrella Fugaz para el que obtuvo una beca que le permitía llevar a cabo una residencia musical en Matadero, con tres meses para dar forma al disco. “Molaba porque te daban un presupuesto que tú podías desglosar como quisieras. En mi caso tenía un espacio de trabajo insonorizado en el que nadie me molestaba y no es lo mismo que currar en casa, que igual estás grabando que haciendo unas lentejas y no te concentras tanto”, nos cuenta sobre aquello. ¿Repetiría?: “Sí, porque poder dedicarte a ello como si fuera tu trabajo es la hostia. Aunque también tener tus vivencias por otro lado viene bien para hacer un disco”.
Si ‘DDH’ fue un primer adelanto nada obvio, con el segundo terminó de atraparnos. ‘En Una Cinta Magnética’ es un tema mucho más directo, con una guitarra acústica que suena, efectivamente, tan folk como pop, y una letra tan emotiva que traspasa ya desde su primera frase (“todo lo que eres se lo debes a alguien y ese alguien no son pocas”). “Diría que es el tema más inmediato, sí. En este pensaba en Notwist, que es un grupo que me gusta mucho y que siempre que los escucho me quedo pensando en cómo lo hacen. Tienen canciones como muy sencillas pero que te enganchan, no te cansan. Así que hice un ejercicio de intentar hacer algo que me recuerde a ellos y salió esto”, nos cuenta Lucas. En ella, y en otras como ‘No Soy Colombiano’ o ‘El Altillo de la Casa de tus Padres’, encontramos esa mirada emotiva y personal al pasado, con una nostalgia bien entendida más cercana al homenaje y el agradecimiento que a otra cosa. Y por ahí también nos toca la fibra. “Es una manera de darle las gracias a mis padres y también de hablar de lo cotidiano con algo de magia y un poco de humor”.
Es precisamente por parte de sus padres por donde le llegan algunas influencias sonoras que se hacen aquí más presentes que nunca, como él mismo nos cuenta: “Soy hijo de colombiano y en mi casa no sonaba Serrat, sonaban cumbias, vallenatos y cosas así. Artistas como Willie Colón. En su momento no lo aprecié demasiado, pero con el paso de los años tu cabeza se abre más y también es una forma de volver al pasado. Pensé hacer una cumbia más tradicional, pero lo intenté y no tenía mucho sentido así que en ‘No Soy Colombiano’ menciono eso y transformo un poco el sonido. No es una cumbia como tal, pero es lo que me salió”.
También encontramos pinceladas de reggae o dub en temas como ‘Las Plantas’, de la que es imposible escapar, y en la que juguetea como nunca con diferentes samplers, algo que es una constante en un disco en el que conviven a la perfección instrumentos orgánicos y sintetizados. “Hay de los dos. Jose, con quién tocaba en mi anterior proyecto, Experimental Little Monkey, tocó la flauta travesera. A veces grabo instrumentos reales, pero luego los sampleo. En muchos temas hay un bajo real y otro que es un sinte o midi, y baterías también hay de las dos, dependiendo de lo que me pedía el tema. Pero en general funciono con electrónicas. Si tuviera una banda de jazz, que tal vez demanda otra calidez o sensibilidad, a lo mejor sí que las grabaría reales, pero para lo que yo hago no las echo de menos. Y para viajar de gira menos todavía” (risas).
Y hablando sobre el directo rematamos la charla. Sobre cómo piensa trasladar al escenario el sonido del disco Lucas nos cuenta: “Siempre he tocado con Ricardo a la batería. Empezamos con Estrella Fugaz los dos solos, pero yo me ocupaba de la guitarra, el sinte y el sampler, además de la voz, y era un agobio. No llegaba. Así que surgió la posibilidad de que se uniera Betacam y ahora, siempre que podamos, queremos ir en formato frío”. Junto a ellos tiene confirmada ya una fecha este sábado en Cáceres, el 12 de marzo en el Microsonidos de Murcia y la visita a La Lata de Bombillas de Zaragoza el 23 de abril, además de actuar como teloneros de Los Punsetes en Madrid, dónde tienen pendiente cerrar una fecha de presentación como protagonistas.
Mientras tanto, Lucas nos regalaba en solitario esta maravillosa revisión acústica de ‘Una DDH y el Electr-o-pura’, además de una versión del tema ‘Una Voz’, de Melenas. Con ellos os dejamos en esta segunda entrega de nuestras Everlong Live Sessions.