Entrevista con Llacuna: «Nuestras letras no pretenden ser pretenciosas o elitistas pero, a la vez, no están vacías de contenido»


«La conexión entre el sello BCore y la peña del Atzavara Club y Sant Feliu Fest ha jugado un papel clave para que mucha gente sienta interés por lo que pasa en la escena catalana. Nosotros venimos de este sentimiento» (Llacuna)
Después de publicar un EP de seis canciones Llacuna lanzaban este mismo años su primer larga duración. En «Incendis» concretan su sonido transportándonos hacia el emo noventero sin dejar de mirar a la actualidad, tanto en su sonido como en sus letras. En estos tiempos tan extraños hemos contactado con ellos para conocer la situación actual del grupo y como se gestó la grabación de este último disco, del que ya os hablamos por aquíhace unas semanas.
Al principio la banda sufrió algunos cambios entre sus miembros, ¿está la formación totalmente asentada a día de hoy?
Sí, la formación está consolidada. Al principio estaba con nosotros Oskar, de Tano!, tocando el bajo y las líneas del primer disco las grabó él. Luego le sustituyó Eric, bajista y uno de los vocalistas de la banda. Con esta formación hicimos los bolos de presentación de las primeras canciones y, con este nuevo disco, Marçal ha entrado como uno más del grupo, con la trompeta.
La grabación de vuestro primer EP ya se hizo en los Ultramarinos Costa Brava pero aquel decidisteis masterizarlo fuera, con Ryan Schwabe. En esta ocasión sí que lo habéis masterizado aquí, con Víctor García. ¿Habéis notado diferencia en el sonido? ¿Por qué decidisteis no repetir esta vez?
Lo de masterizar con Ryan Schwabe surgió porque, en ese momento, en Ultramarinos estaban a tope de curro y nosotros habíamos marcado unos tiempos que nos obligaban a mirar otras posibilidades. Contactamos con Ryan, que ha masterizado discos que nos flipan, de bandas como Hop Along, Algernon Cadwallader o Snowing y la verdad es que fue muy atento con nosotros y sacó un sonido guay al disco. De todos modos, estamos muy contentos de trabajar íntegramente con Ultramarinos porque conocen el sonido del grupo y la verdad es que Víctor hizo un trabajo de mastering excelente, consiguiendo un sonido potente pero natural y orgánico a la vez.
También veo que de la grabación en esta ocasión se encargó Borja Pérez, que además de por su labor de productor le conocemos por tocar en bandas afines a vuestro sonido, como Please Wait. ¿Cómo fue su labor? ¿Contribuyó mucho a los temas o fue más bien una labor de grabación externa?
Previamente habíamos grabado una maqueta instrumental de las canciones con Pep de Anchord, en el CS ATV de Sarrià de Ter, donde estamos vinculados. Eso hizo que, en lo que se refiere a la parte instrumental, no ejerciera de productor más allá de ayudarnos a encontrar el sonido de batería, bajo y guitarras, ya que teníamos muy claras las estructuras de las canciones. Cuando ejerció más como productor fue en la fase final, con las voces y algunos arreglos. Trabajar con él también es genial porque al final es nuestro colega, conoce nuestro rollo musical y sabe donde podemos flojear, así que sólo interviene en las partes que cree que puede aportar algo diferente.
Encuentro muchos más matices y muchos más estilos convergiendo en vuestras nuevas canciones respecto a las del EP a pesar de que estos temas parecen mucho más directos ¿Cómo veis a día de hoy aquellas canciones y cuál creéis que ha sido la principal diferencia entre las más antiguas y las nuevas?
Estamos contentos con aquel primer EP pero está claro que las nuevas canciones representan un momento de muchos cambios para la banda. Como comentábamos, el nuevo disco tiene canciones que van al grano y, en general, las estructuras son un poco más redondas que las del anterior. Con el tiempo hemos aprendido a componer juntos. Antes componíamos mucho en casa (los guitarristas principalmente) y llegábamos al local con el tema casi cerrado. Ahora también escribimos cosas en casa pero estas composiciones son susceptibles de cambiar en el local según la percepción de los miembros del grupo, eso hace que podamos analizar las composiciones con cierta distancia para acabar de decidir entre todos qué les falta o les sobra. Y, por supuesto, ahora todos tenemos en mente que queremos crear canciones más redondas. Es verdad que, por el confinamiento, ahora mismo estamos componiendo cada uno desde casa y compartiendo demos. A ver cómo va.
¿Cómo funcionáis de cara a la composición? ¿Preferís encerraros y centraros en crear un nuevo disco o van surgiendo ideas de manera escalonada?
Lo ideal sería escribir canciones mientras estamos presentando el disco, para que el parón de la banda sólo fuera para grabar y editar. Esto es imposible para nosotros porque, entre los trabajos y la distancia geográfica entre los miembros de la banda, hace que como mucho podamos quedar un día a la semana para ensayar. Con el disco anterior estuvimos más de un año sin tocar para preparar, grabar y editar el disco. Esta es una situación extraña para cualquier grupo, ya que lo que nos motiva más es tocar en directo pero era necesario y también pensamos que el público agradece estos silencios para volver con más ganas a los conciertos de Llacuna.
Ya en el último tema del EP escuchábamos una trompeta, pero ¿cuándo decidisteis incorporarla como un instrumento más de pleno derecho? Es verdad que es inevitable pensar en American Football al hablar de ella, pero creo que la manera en la que la utilizáis es bastante diferente a como lo hacen ellos. En cualquier caso, no sé si han sido una influencia para vosotros en ese sentido.
Nos animamos a grabar seis canciones con arreglos de trompeta en este disco y, entre la grabación del disco y a posteriori, nos dimos cuenta de que si Marçal fuera miembro de la banda seguramente le hubiéramos pedido que grabara trompetas en todas las canciones. Eso nos hizo plantear a Marçal la posibilidad de incorporarse al grupo como uno más, no como colaborador.
American Football y otras bandas relacionadas utilizan este recurso de la trompeta y está claro que esto ha ejercido una influencia importante en Llacuna. Aun así, como comentabas, nosotros utilizamos este recurso de forma un poco distinta a la mayoría de grupos del estilo y seguramente es porque Marçal tiene otras influencias que vienen de estilos como el ska o el reggae. American Football siempre será una influencia pero, en este caso, al tener un rollo más festivo nuestra música, igual nos fijamos más en la forma que la usan, por ejemplo, Just Friends.
Siguiendo con las influencias, es bastante clara la de Sport, pero qué otros grupos actuales seguís de cerca últimamente.
No todos están activos ahora mismo pero, más o menos, podemos decir que son actuales: Oliver Houston, Gulfer, Glocca Morra, Mom Jeans, Pet Symmetry, I Love Your Lifestyle, Macseal, Del Paxton, Ratboys, Jail Socks, I’m Glad It’s You, The Hotelier,… Os recomendamos echar un vistazo a esta playlist que hicimos hace poco.
Por otra parte, ¿qué tiene la Costa Brava, Girona y Catalunya en general para que haya una tradición tan buena de grupos que se mueve por ese sonido emo de los noventa?
El mal recuerdo que dejó Jordi Pujol. No, ahora en serio, nos ha influenciado mucho el Sant Feliu Fest y el Atzavara Club. Por ahí pasaban bandas como Jr. Ewing, At The Drive In, These Arms Are Snakes, Envy, etc. Una infinidad de bandas de primer nivel aparte de las bandas locales como No More Lies, Crossword, Hopeful… Pero, no sólo estaban pasando cosas interesantes en la Costa Brava, en Barcelona o en el interior también habían bandas buenísimas como Based On A Lie, Aina, los posteriores Nueva Vulcano, Standstill, The Unfinished Sympathy, Zeidun,… que nos influenciaron profundamente a todos. La conexión entre el sello BCore y la peña del Atzavara Club / Sant Feliu Fest ha jugado un papel clave para que mucha gente sienta interés por lo que pasa en la escena catalana. Y nosotros venimos de este sentimiento.
Creo que el tema ‘Incendi’ en sus dos partes define a la perfección todo el disco y vuestro sonido actual ¿Lo veis así desde dentro?
Sí, y quizá también refleja un poco la transición entre el EP y el LP. La primera parte tiene que ver más con el sonido post-hardcore emotivo de la banda, que también podemos ver en otras composiciones del disco. La segunda parte, a lo mejor refleja la necesidad de escribir canciones más redondas y festivas. Este es un disco un poco de transición, en el cual hemos asentado las bases del sonido del primer EP y también hemos explorado sonoridades nuevas para el próximo disco. A lo mejor el próximo disco será más homogéneo en cuanto al tipo de canciones pero sin perder el ADN característico del grupo, que hace que nuestros sonido, dentro del género, sea un poco característico.
Entiendo que las letras del disco se mueven entre las ganas de pasarlo bien y la incomodidad por algunas de las cuestiones que nos ha tocado vivir como sociedad. ¿Es un resumen de cómo afrontáis personalmente la vida?
Creemos que, básicamente, nuestras letras no pretenden ser pretenciosas o elitistas (somos contrarios a ello) pero, a la vez, no están vacías de contenido, todo lo contrario. Estas letras reflejan la personalidad de cada uno de los letristas. Cada uno tiene su manera de escribir y de usar el lenguaje pero, a la vez, nos parecemos mucho en la forma de ser (millennials, precarios, tocados por ya no sé cuántas crisis, cultivados en el punk y en el DIY, de pueblo, izquierdistas, nos gusta la juerga) y esto se refleja en las letras.
Tengo la sensación de que hace años se hablaba mucho de como el cantar en inglés podía abrir puertas a la hora de moverse fuera de España, especialmente a bandas con estilos musicales por tradición puramente anglosajones. Actualmente me da la sensación de que es un debate ya superado y ahí tenemos a bandas como Berri Txarrak, cantando en euskera y girando por todo el mundo. ¿Creéis que utilizar el catalán como lengua puede cerraros alguna puerta o sois de la opinión de que este es un debate ya algo caduco y superado? ¿Os habéis planteado en alguna ocasión cantar en inglés?
Nuestra lengua materna es el catalán y con Llacuna tuvimos claro que nuestras letras serían en catalán. Por fin este debate ya está bastante superado, o eso creemos. Basta de autoodio. Y, sobre todo, que cada uno se exprese como quiera, sin perjuicios. Evidentemente, grupos como Berri Txarrak han contribuido muchísimo en ese aspecto y es un grupo que los cinco respetamos, no sólo por eso, sino también por su arte, por sus principios y por su manera de funcionar.
La gira de presentación se ha visto tristemente truncada por la situación sanitaria actual. ¿Cómo estáis viviendo estos días? ¿Habéis recolocado ya algunas fechas o por el momento preferís esperar a ver cómo se desarrollan los acontecimientos?
Pues la verdad es que fue un puñetazo en el estómago, no os vamos a mentir. Es que piensa que el disco salió justo el primer día de confinamiento y teníamos una gira estatal organizada y varios conciertos de presentación en Catalunya. Pero, bueno, no sirve de nada lamentarse y lloriquear, así que intentamos estar activos, componiendo, intentando mover el merch y los discos, e incluso hace poco estrenamos un videoclip hecho en stop motion desde casa aprovechando que hemos tenido más tiempo. También es este un buen momento para reflexionar sobre porqué hemos llegado a esta situación y sobre qué tipo de sistema y sociedad queremos cuando podamos salir otra vez a la calle. Esperemos que el ruido de protesta no se quede sólo en redes y salgamos a las calles de verdad.
Algunos de vosotros no solo tocáis en otras bandas si no que formáis parte de sellos y otras actividades relacionadas con la música y todas ellas están viviendo una situación crítica. ¿Cómo creéis que podremos salir de esta y cuáles creéis que son las mejores opciones para apoyar desde casa todas estas actividades?
A nivel musical, por suerte no dependemos laboralmente de este sector. Todos tenemos otros trabajos y nuestra vinculación con la música (Llacuna, el sello DIY Saltamarges que llevan Gerard y Albert, el CS ATV, la organización de conciertos, etc.) no es profesional. Y decimos que “por suerte” no dependemos de este sector porque la verdad es que es un sector muy poco organizado a nivel de derechos laborales, por ejemplo. Sin ir más lejos, y hablando de los músicos, en Francia, si eres músico y facturas más de 40 conciertos al año, tienes derecho a un complemento salarial, seguridad social, paro, etc. Esto es impensable en un país como España. Está claro que compartimos que el público apoye a sus artistas favoritos comprando merch, discos o pagando por conciertos online pero el problema no se soluciona así. Se trata de un problema más de fondo, de dar valor a la cultura, y estructural, a nivel de organización y regularización.