The Octopus Project + It It Anita + Carmen Costa @ Moby Dick Club (Madrid) 12-10-2016


Con el comienzo de la gira por nuestro país de los norteamericanos The Octopus Project como excusa la gente de Miel de Moscas preparó el pasado miércoles su primera fiesta internacional en una Moby Dick que ha cambiado la madera por el ladrillo visto pero que no ha dejado de lado ese sonido tan nítido como atronador que la convirtió hace años en una de nuestras salas favoritas de la capital. Un escenario perfecto para la descarga de los belgas It It Anita, que con su particular disposición en el escenario (tocando casi en círculo y con la batería en una lateral) se encargaron de abrir la velada y poner el listón a la altura de los focos que colgaban del techo. Como una bomba expansiva, les sobraron 25 de los poco más de 30 minutos que estuvieron sobre el escenario para arrollarnos a base de descarga física e hipervitaminada. Su post hardcore de vieja escuela nos trae a la mente a los siempre añorados Fugazi, con esos constantes cambios de ritmo, la repetición de patrones y esa verborrea que comparten sus dos cantantes, alternando frases al ritmo de una aguerrida base instrumental. Un show visceral que terminaron entre el público y con una batería a la que le sobraban los micrófonos. Definieron el hardcore y sentaron cátedra. Todos atentos a su inminente primer larga duración, que se publicará el próximo mes de noviembre.
Tras ellos fue el turno de Carmen Costa. Con una extensa trayectoria a sus espaldas, la formación mexicana volvía a nuestro país y hacía crecer sus canciones sobre el escenario a base de psicodelia y tres guitarras que se encargaron de generar un sólido muro sonoro. Más contundentes que en sus grabaciones de estudio empezaron mostrando su cara más rockera para terminar acercándose al pop y algunos inevitables ramalazos latinos que los emparentan con eso que llevamos años conociendo por aquí como “indie”.
Por último cerraban una noche tan arriesgada como ecléctica los ya mencionados The Octopus Project. El peculiar grupo llegaba desde Austin con el aval de haber enamorado en su concierto del pasado South By Southwest a los encargados de promover esta gira (e incluso publicar su próximo disco en nuestro país) y nada más arrancar su show entendimos el porqué. Con una propuesta difícil de definir, The Octopus Project comenzaron su trayectoria como una formación de rock instrumental y han terminado añadiendo a sus canciones voces y matices mucho más cercanos al pop electrónico con el paso de los años. Lo mejor de su directo es que en él las fronteras sonoras se diluyen hasta desaparecer completamente y convertir su sonido en una coctelera espacial que soporta sin fisuras la sombra de la indefinición. Acompañados de visuales y jugando con la escenografía sus cuatro miembros se traspasaron instrumentos y parafernalia electrónica haciendo gala de versatilidad y sorprendiéndonos a base de tropicalismo sintetizado, melodías siderales, rock matemático, baterías golpeadas con contundencia y ese theremin que acarician robóticamente. Totalmente desatados, es sobre el escenario donde parecen encontrarse en su habitat natural y a poco que se alineen los astros esta gira debería funcionar como una siembra de la que pronto recoger frutos.